De camino al Nobel | Las predicciones del Premio Nobel de Literatura 2021 por el escritor Luis Panini

Luis Panini

 

Como es usual cada año, en Katabasis contribuimos con un par de nombre de escritores que nos gustaría que se hicieran ganadores del Premio Nobel de Literatura. En esta ocasión, publicamos aquí la guía de candidatos que preparó en su Twitter el escritor mexicano Luis Panini. Esperamos que esta lista pueda ser una hoja de ruta de lectura de nuevas obras y estilos literarios, además de una predicción del que podría ser el ganador del Nobel de este año.

1. László Krasznahorkai

Susan Sontag lo declaró el maestro húngaro del Apocalipsis. Su prosa está plagada de oraciones subordinadas que serpentean con elegancia lírica. Es, sin lugar a duda, uno de los mejores novelistas vivos.

2. Hélène Cixous

Durante casi 5 décadas se ha mantenido al frente del movimiento feminista y no sólo nos ha enseñado sobre la «écriture feminine», sino también sobre cómo innovar fusionando teoría, autobiografía y ficción en una sola obra literaria.

3. Gerald Murnane

Vive en medio de la nada, rodeado de polvo y canguros, en una villa con menos de 200 personas. Nunca ha viajado fuera de Australia. Su ficción coquetea con lo autobiográfico y viceversa.

4. Scholastique Mukasonga

Con una narrativa que conmueve y perturba a partes iguales, sus novelas retratan la tensión entre Hutus y Tutsis que dio pie a uno de los eventos más viles de la historia y que desbarató a una nación.

5. Silvia Baron Supervielle

Nació en Argentina, pero es en Francia donde es una cumbre. Tiene 86 años y escribe en su idioma adoptivo. Lo que logra comunicar en una breve estrofa de versos cortísimos es sorprendente.

6. António Lobo Antunes

Gracias a su formación académica como médico psiquiatra ha escudriñado con maestría las pasiones y obsesiones que gobiernan a sus personajes, quienes tratan de encontrar su lugar en un mundo indiferente.

7. Mircea Cărtărescu

La ciudad delirante como síntoma. El deseo de contener el universo entero en un solo libro. Maximalismo vestido de laberinto en un paisaje donde las preguntas no obtienen respuestas y desestabilizan a quien las lee.

8. Yōko Ogawa

La perversidad nunca ha sido más refinada, la crueldad nunca más sutil. También deja en la página registros muy emotivos. Su empleo de yuxtaposiciones sentimentales provoca un eco que te persigue al terminar uno de sus libros.

9. Jacques Roubaud

Francés, por supuesto. Uno de los miembros más destacados de OuLiPo (único movimiento literario vigente que vale la pena). Empecinado en «descubrir» su propia memoria mientras escribe y «destruirla» cuando queda escrita.

10. Ngũgĩ wa Thiong’o

Su escritura provocó su encarcelamiento. Sus múltiples memorias son tan emotivas como alarmantes. Su voz es un verdadero testimonio que dice tanto sobre las penurias, no sólo de una nación, sino de todo un continente.

11. Menchu Gutiérrez

La belleza de su escritura bordea con la prosa poética. Leerla da la impresión de estar mirando una nebulosa o estudiando la geometría de una telaraña. Es Virginia Woolf reencarnada, pero con estilo distinto.

12. Magdalena Tulli

Si de originalidad literaria se trata, a esta polaca la acomodo en un pedestal altísimo. Hace que las piedras hablen, pierde el control de sus personajes, dibuja en el mapa de su imaginación nuevos territorios claustrofóbicos.

13. Carole Maso

Uno de los mejores secretos guardados de la literatura estadounidense. La calidad de su prosa supera a la de tantos consagrados. Sus registros narrativos son tan accesibles, pero algo muy anormal flota en el entrelineado.

14. Alexander Theroux

«Polémica» y «políticamente incorrecta» no comienzan a describir su exuberancia lingüística. Su humor negro ha sido injustamente malentendido. Uno de los últimos genios vivos. Sus novelas no se reimprimen.

15. Philippe Sollers

Un poco inaccesible. ¡Jacques Derrida analizó textos suyos! Cuando no escribe novelas monolíticas de un solo párrafo y sin puntuación, te bombardea con miles de puntos suspensivos (miles…). Un francés de peso enorme.

16. Amy Hempel

La verdadera jefa del minimalismo estadounidense siempre debe estar al alcance de la mano. Sus 5 libros de ficción breve contienen una plétora de obras maestras. La precisión de su pluma puede confundirse con la de un bisturí.

17. Cormac McCarthy

¿Qué puede decirse de un autor que debió obtener este premio hace 20 años? Ha escrito algunas de las novelas más bellas, desafiantes, perturbadoras y luminosas que he leído. En pocas palabras: un maestro de su oficio.

18. Alexander Kluge

Reconocido cineasta y autor de cientos de relatos que diseccionan con ojo clínico y versátil (a veces parecen reportajes, a veces fusiona la realidad con la ficción) las vicisitudes que aquejan a la sociedad contemporánea.

19. Ida Vitale

Imagina que naciste en un cubo de concreto y que de él nunca escaparás. Cerca tienes un volumen de su poesía y eso es suficiente para conocer el mundo entero, porque sus páginas son espejos de todo lo que es humano.

20. John Barth

Máxima figura del posmodernismo estadounidense. Nadie ha llevado tan lejos la metaficción como lo ha hecho él. Se trata de un autor lúdico, muy exigente y algo cerebral, pero una vez que accedes a él la recompensa es enorme.

21. Patrik Ouředník

Checo avecindado en Francia cuya propuesta explora las posibilidades de la intertextualidad. Para ello reescribió la historia del s. XX de forma satírica. Mezcla géneros en libros que resultan ser anti-novelas.

22. Julia Kristeva

Comparto con ella la obsesión literaria con la imagen del cuerpo decapitado. Una de las filósofas y psicoanalistas más célebres que utiliza sus teorías para construir los personajes de sus novelas.

23. Sergio Chejfec

Prosa que se anda por las ramas, meditabunda, imprecisa, lenta y llena de vagabundeos y mensajes inconclusos, pero que provoca un efecto hipnótico y bellísimo, único en la literatura latinoamericana.

24. Frank Bidart

Bucear en los fondos del alma humana significa explorar sus regiones más oscuras y él lo hace con inigualable belleza. Sus dotes de ventrílocuo le han permitido apropiarse de la voz de una mujer anoréxica o de la de un asesino de niños.

25. Péter Nádas

Este gigante literario ha meditado sobre su mortalidad frente a un árbol mientras registraba sus cambios sutiles entre estaciones. En sus libros las vidas (y cuerpos) de los seres humanos parecen estar interconectados de formas paralelas.

26. Jon Fosse

El peso existencialista de su prosa hace que el mundo desaparezca mientras lo lees. Te confronta con dilemas cotidianos que preferirías evitar debido a las trágicas consecuencias. Es sublime, pero la depresión impera.

27. Deborah Eisenberg

Sus relatos, invariablemente de largo aliento e impredecibles, son algunos de los más comentados en círculos académicos porque despliegan un conocimiento exquisito sobre la condición humana y una inteligencia envidiable.

28. Margo Glantz

Autora de una obra vasta y multitemática. Ha reimaginado el mundo desde la silla de un dentista. Cabellos, zapatos y seres náufragos coexisten en una prosa extraordinaria cuya amplitud no conoce límites intelectuales.

29. Dubravka Ugrešić

Es capaz de confeccionar una novela con múltiples estilos narrativos para evidenciar el talento de su escritura camaleónica. Leyendas, sadomasoquismo, absurdo: todo gotea de la pluma de esta talentosa yugoslava.

30. Padgett Powell

Algunos de los personajes más extraños y situaciones cómicas habitan las novelas y cuentos de este orfebre literario. Ecos de Beckett y Barthelme silban a través de las páginas de sus asombrosos libros, pero él es su propio genio.

31. Mario Bellatin

Hombre y fantasma. Creador de un mundo hermético y autosuficiente. Su escritura trasciende lo literario. Autor de 2 o 3 libros, pero fragmentados en más de 40. Su obra no tiene igual y su cuerpo no debería proyectar sombra.

32. Annie Ernaux

Su escritura apasionada es un sismógrafo que ha registrado su dolor personal durante más de 4 décadas en una serie de «novelas» autobiográficas. Sus temas: la enfermedad, el desamor, un aborto, la muerte de su madre. Que le den el Premio Nobel de Literatura 2021 a Annie Ernaux.

33. Drago Jančar

Europa Central es el escenario principal en su novelas y relatos donde sus personajes parecen estar en conflicto perpetuo con diversas instituciones y el poder represivo que éstas ejercen sobre sus ciudadanos perseverantes.

34. Kjell Askildsen

Uno de los cuentistas más fascinantes de nuestro tiempo. Verdadero minimalista. Son tan pocos quienes pueden encapsular las emociones más complejas mediante una prosa en apariencia austera e historias «sencillas».

35. Zadie Smith

45 años y no creo que sería prematuro premiarla. Un crítico acuñó el término «Realismo histérico» para ningunear su obra y sólo consiguió incrementar su número de lectores. Es una arquitecta notable de microcosmos polifónicos.

36. Fleur Jaeggy

Nunca deja de sorprenderme cuánto puede meter en sus libros brevísimos. Te sientas a leer uno y una hora después terminas, pero se queda contigo, negándose a desaparecer hasta que lo vuelves a leer de principio a fin.

37. Ron Rash

Además de algunos libros de C. McCarthy, no creo que alguien más ha logrado capturar la brutalidad y belleza de los Apalaches con un poder tan lírico. Comienza con su «Something Rich and Strange». No creerás lo que leen tus ojos.

38. Vladimir Sorokin

El chico malo de la literatura rusa. Debido a varias escenas en sus libros ha sido acusado de pornógrafo, inmoral y de estar en contra del gobierno. Para él la literatura son signos tipográficos en papel y nada más.

39. Susan Howe

Es una poeta con mil cabezas. Deconstruye el lenguaje y lo reinventa usando sus propias reglas. Necesita de pocas palabras o versos para pasar de la abstracción total a lo inequívocamente concreto.

40. Cole Swensen

Sus poemas son paisajes panorámicos de una belleza verbal inconmensurable que parece favorecer la libre asociación como un método de ensamblaje capaz de unir y ofrecer imágenes tan impactantes y frescas que casi puedes olerlas y saborearlas.

41. Pierre Senges

Este hombre es un puente hacia otras literaturas, un túnel a través del cual se puede acceder a otros escritores. Narrativas falsas, apropiaciones literarias, reivindicaciones de personajes menores creados por otros definen su obra.

42. Cristina Rivera Garza

El cuerpo, la memoria ajena, lo fronterizo. En su escritura todo queda cartografiado a manera de territorios explorados con una inteligencia envidiable que no busca renovar la narrativa actual, sino inventarla.

43. Gabriel Josipovici

Autor de novelas que estiran el tiempo y relatos que no son lo que parecen y llevan a sus lectores a finales inesperados después de andar por rutas desconocidas. Su obra está interesada en una gran variedad de disciplinas artísticas.

44. Walter Abish

No es el más prolífico, pero gracias a novelas complejas y relatos que desconciertan ha logrado montar un espectáculo de genio literario que exige del lector un cerebro de gran aguante.

45. Rosemarie Waldrop

La poesía experimental es rara vez reconocida con premios literarios de gran prestigio. A través de una destreza lingüística extraña e inesperada, ella te permite ver el mundo como si lo vieras con ojos ajenos.

46. Yuz Aleshkovsky

Escritor ruso exiliado en EE.UU. Su narrativa, que favorece voces vernáculas y expresiones idiosincráticas, padeció censura debido a su vena satírica y situaciones obscenas. Hacen falta más escritores de esta calaña.

47. Chris Ware

Nos enseña que la novela gráfica también puede ser literatura. Su cableado cerebral exhibe los secretos más íntimos de sus personajes. La minuciosa composición de cada una de sus páginas es una obra de arte.

48. Myung Mi Kim

Acumulación verbal, fragmentación insistente, el espacio blanco en la página, residuos de una lengua materna que discretamente salpican su poesía y evidencian la inhabilidad del lenguaje para comunicar ideas absolutas.

49. John McPhee

Si te interesa «experimentar» la naturaleza existes dos maneras de hacerlo. Puedes salir y verla por ti mismo o puedes leer sus ensayos líricos sobre algunos de los lugares más extraordinarios en el planeta.

50. Peter Sloterdijk

Desde 1950 la Svenska Akademien no ha distinguido a un filósofo que sea exclusivamente filósofo. Él ha reinterpretado la historia de la humanidad a través de espacios, dividiéndolos en «Esferas» (Burbujas, Globos y Espumas).

51. Robert Coover

La influencia que este hombre ha ejercido en tantos cuentistas y novelistas es innegable. Su escritura es rica en parábolas, sátira y puede ser políticamente incorrecta. Sus relatos a veces son desconcertantes y, casi siempre, graciosos.

52. José Agustín

Es un lugar común decir que alguien es la «voz de toda una generación», pero de él podemos decirlo. A través de su obra ha encapsulado la psique de la juventud de un país, con todas sus alegrías y ansiedades.

53. Jean Frémon

Maestro de la écfrasis que favorece textos fragmentados y caleidoscópicos para ensamblar novelas-retratos apasionantes de grandes artistas o de un grupo de ciudadanos promedio que, de alguna manera, sintetiza toda una cultura e identidad.

54. Giorgio Agamben

Algunas de sus declaraciones recientes son lamentables (básicamente ha negado el Covid-19), pero haré eso a un lado porque lo que puedes aprender de su obra filosófica sobre estética, lingüística, religión, etc. sigue siendo invaluable.

55. Garielle Lutz

Una de las escritoras más sagaces de EE.UU. que alcanzó estatus de culto hace décadas. Hacer contacto con su obra es como descubrir un nuevo potencial de la la literatura. Nadie, estadounidense o no, escribe una oración como ella.

56. Raduan Nassar

Una verdadera leyenda viviente. Sólo ha publicado 3 libros y dejó de escribir hace casi 40 años. La composición de sus oraciones tiende a imitar ritmos bíblicos que resaltan la riqueza de sus microcosmos rurales.

57. Edgardo Cozarinsky

Los personajes de sus cuentos y novelas están perpetuamente destinados a cruzar caminos como si impulsados por la inevitable maldición que es la vida. Su tono nostálgico, tan característico en su obra, siempre parece venir de lejos.

58. Joan Didion

Manitas de canario que han cargado el peso del mundo y un desconsuelo inconmensurable. La que decide pensar mágicamente, la envuelta por noches azules. Vida que ha devenido arte debido a las experiencias más dolorosas.

59. Felipe Polleri

Si eliges uno de sus libros, prepárate para un viaje extraño y brutal en el que experimentarás algunas de las atmósferas más peculiares y personajes más desconcertantes de la literatura latinoamericana.

60. Éric Chevillard

Tiene una de las voces más originales y disparatadas de la literatura francesa contemporánea. Sus libros parecen tomaduras de pelo o alucinaciones. Divertido como pocos, pero sin caer en facilismos cómicos.

61. Kathryn Davis

Grietas casi invisibles serpentean en sus ficciones, en las que realidades desconocidas empujan a los personajes hacia esa orilla borrosa donde cordura y locura comienzan a fusionarse. Bienvenidos al reino de lo inusual.

62. Ivan Vladislavić

Sudafricano de origen croata que juega con referencias culturales y perspectivas distorsionadas. Sus enredos verbales dan pie a una maleabilidad narrativa para averiguar qué puede hacer la novela contemporánea.

63. Harryette Mullen

Su obra es escasa, pero su efervescencia lingüística y peripecias fonéticas, aunadas a la exploración de su identidad en poemas compactos que admiten múltiples lecturas, la han convertido en una de las más respetadas.

64. Diane Williams

Tratar de concederles sentido a sus textos es una causa perdida, pero ahí radica su poder seductor: en cómo desfigura el pensamiento. No podría ser más clara, pero tampoco más ambigua. Casi no le entiendo y me obsesiona.

65. Wayne Koestenbaum

Un fabulista fabuloso. Un esteta inimitable. Un flâneur incorregible. El barroquismo de su obra fluye sin esfuerzo y hace de su escritura una de las experiencias más gratificantes de la literatura estadounidense contemporánea.

66. Dumitru Țepeneag (también deletreado Tsepeneag)

Tenemos que agradecer a Dalkey Archive por traducir a este coloso rumano. Uno de los últimos vanguardistas que favorece secuencias oníricas sobre –¡la tan aburrida! – realidad convencional.

67. Ali Smith

«How to Be Both», «There but for the», «Like», «Other Stories and other stories». Estos son algunos de sus títulos y ya indican cómo manipula el lenguaje para crear narrativas siempre ingeniosas y desorientadoras.

68. Jacques Rancière

Uno de los principales filósofos en todo lo relacionado con la estética que encuentra significados nuevos y ocultos en obras de arte, incluyendo películas, que nos enseña cómo percibir una imagen y qué hacer con ella.

69. George Saunders

Su cuento «Fox 8» me hizo reír, llorar, otra vez reír y llorar en un lapso de 30 minutos. Fue una experiencia de lectura que me conmovió hasta la médula. Y todas sus historias magistrales albergan las aristas más bellas y extrañas de la vida.

70. Marjorie Perloff

¿Y si la Academia Sueca reconociera el trabajo de una crítica literario? Durante años su erudición nos ha guiado por los ríos, cascadas y afluentes de la poesía experimental y de vanguardia como nadie más.

71. Nathaniel Mackey

He leído su obra durante casi 10 años, siempre hipnotizado por su musicalidad. Aunque ha publicado numerosos libros de poesía, básicamente ha escrito dos secuencias líricas entrelazadas: Mu & Song of the Andoumboulou.

72. Lyudmila Ulitskaya

Su narrativa cuenta con esa vitalidad que ha convertido a muchos rusos en clásicos, pero la forma en que desarrolla los perfiles psicológicos de sus personajes no tiene nada que ver con el talento literario de sus predecesores.

73. Julián Ríos

Profundamente admirado por los difuntos Carlos Fuentes, Octavio Paz y Juan Goytisolo, y considerado por muchos como la contraparte española de James Joyce debido a su originalidad gramatical, este escritor ha llevado a su lengua al límite.

74. Claire Malroux

Para ella, la poesía es un medio que detona la memoria. La mayoría de sus poemas parecen ser bloques de prosa divididos en versos, pero esto no les resta lirismo. La cualidad evocadora de sus recuerdos es tan relajante como un bálsamo.

75. Sophie Calle

Un amante la dejó plantada en Nueva Delhi. Siguió a un hombre en París y fotografió sus acciones. Trabajó como camarera y examinó las pertenencias de los huéspedes del hotel. Su vida deviene arte. Su arte deviene escritura.

76. David Miklos

La presencia perpetua del pasado en las vidas de sus personajes te golpea con la fuerza de una presa rota. A través de su característico estilo sobrio y telegráfico, ha capturado pasiones tan complejas que revelan de qué están hechos los humanos.

77. Charles Baxter

El insomnio es el mejor aliado de este escritor tan talentoso y comprometido con el oficio que uno desearía secretamente no verlo dormir nunca. Incluso puede sacarles brillo a los detalles más mundanos de sus libros.

78. Pierre Michon

¿Cómo clasificas la obra de un escritor cuya prosa fluctúa entre el retrato y la viñeta, la anécdota histórica y el fragmento biográfico? No lo haces, pero esos son los módulos básicos de su obra.

79. Liliana Heker

A través de relatos magistrales, ha reunido un ejército memorable de madres, hijas, amas de casa, empleadas domésticas, mujeres al borde de la emancipación emocional y otras que enfrentan desigualdades de clase sutiles, pero devastadoras.

80. Etel Adnan

Creadora de una obra que es producto de la más pura fusión literaria: ensayos que se leen como poemas, poemas que se leen como memorias, aforismos que se leen como ficciones y revelan las bellezas y horrores de lo que significa ser humano.

81. Ismail Kadare

No soy el lector más asiduo de ficción con trasfondo histórico, pero sus novelas me han mantenido enganchado porque exploran temas peculiares: los sueños de una población, una novia amurallada, la recuperación de cadáveres.

82. Lyn Hejinian

Varias de sus obras han alcanzado estatus canónico en la poesía estadounidense. Su escritura es híbrida, ya que puede asociarse a fuerzas líricas aparentemente opuestas: la escuela de la poesía Confesional y los poetas del L=E=N=G=U=A=J=E.

83. Ryszard Krynicki

«Vivo/en el lugar de la muerte», escribió este hombre que nació en un campo de concentración. La desolación densa y persistente de su poesía permanece en tu cuerpo después de leerla, como un metal pesado, imposible de expulsar.

84. Jacques Poulin

Gatos aparecen en todos los libros que he leído de él, pero esa no es la razón por la que me gusta tanto (aunque ayuda). Su prosa es tranquila, introspectiva y recatada, pero muy poderosa. Hay atmósfera, sombras y nostalgia interminable.

85. Ann Lauterbach

Sus poderes imaginativos le han permitido crear su propia cosmogonía lingüística, una desplegada en formas fragmentarias que siempre llevan al lector por caminos rotos, inconexos y ofrecen soluciones inesperadas.

86. Pascal Quignard

«Erudito» es la primera palabra que me viene a la mente cuando pienso en él. Sus libros tienden a ser inclasificables. ¿Son ensayos? ¿Ficciones? ¿Tratados históricos? ¿Investigación? No importa porque ni uno solo me ha defraudado.

87. D. A. Powell

Poesía elástica compuesta de versos panorámicos que se extienden de un lado a otro de la página en bellos y alargados versos que prolongan la presencia de los desaparecidos, pero también la de los que sobreviven.

88. Christine Schutt

Estilista literaria de primer orden y una de las escritoras estadounidenses más originales de la actualidad. Su trabajo explora territorios inusuales de la vida doméstica, creando retratos que la mayoría de las familias preferirían mantener en el ático o en el sótano.

89. Olvido García Valdés

Es en el tono conversacional de su poesía donde radica la mayor riqueza lírica de esta poeta, en cómo nos revela los misterios de su mundo, como si estuviéramos sentados a su lado, comentando el vuelo de aves errabundas.

90. Steven Millhauser

Incuestionable amo del relato. La imaginación de este estadounidense debería ser declarada patrimonio nacional. Los terrenos estrambóticos que su mente visita desdibujan la línea delgada entre la realidad y la fantasía.

91. Coral Bracho

Su poesía representa un filtro indispensable para que el mundo se revele ante ti de maneras insospechadas, como si lo miraras a través de una piedra preciosa facetada que consigue doblar la luz y llevar a tus ojos a nuevos parajes.

92. Tobias Wolff

Además de escribir una de las memorias más célebres, es autor de algunos de los mejores cuentos en inglés. Sabe exactamente de qué está hecha una persona y su prosa no rehúye y muestra hasta los detalles más inquietantes.

93. Ron Silliman

Su poesía de capas múltiples siempre toma las rutas más sinuosas y menos exploradas. No se limita a escribir libros de poemas, sino proyectos líricos voluminosos que siguen creciendo y mutando durante años, como una vida humana.

94. Lyudmila Petrushevskaya

Cuidado, lector(a): sus historias se tornan lúgubres en la página menos esperada. No le interesa el lado oscuro de la humanidad, sino el lado más oscuro, y nos ha mostrado por qué merecemos una extinción masiva.

95. David Trinidad

Las obsesiones desquiciadas son el mejor combustible creativo que un escritor puede anhelar. Por fortuna, él tiene muchas: muñecas Barbie, películas clásicas, listados, glamur, telenovelas y Jacqueline Susann. Extravagancia en su máxima expresión.

96. Calvin Tomkins

No sólo escribió la biografía más admirada sobre Duchamp, sino que también ha documentado con fervor y franqueza docenas de perfiles de numerosas leyendas del mundo del arte, haciendo de la crítica un arte literario en sí mismo.

97. Rafael Courtoisie

Uruguay nos ha dado algunos de los escritores más «raros» de la literatura latinoamericana (e.g. Levrero, Polleri), y su obra es una de las más extrañas, mordaces y libres de complejos que he leído. Anti-solemne como pocos.

98. Enrique Vila-Matas

Gran embustero, un moderno Virgilio que dibuja mapas apócrifos y te lleva por rutas falsas. Autor de novelas inquietantes que deforman la realidad al reflejar un espejo y su reflejo frente al reflejo de otro espejo.

99. William T. Vollmann

El FBI lo etiquetó como el sospechoso S-2047 mientras buscaban al Unabomber. Sus libros, generalmente de alcance monumental, están llenos de tropeles curiosos de inadaptados y marginados.

100. Paul Beatty

Hace tiempo me prometí nunca más leer su trabajo en público, a menos que deseara que mi risa incontrolable molestara a los demás. Avispada, irreverente e indispensable, su prosa revela el eterno choque de culturas que no amaina.

101. Diamela Eltit

Identidad nacional, denuncia política y una inequívoca abogacía por la justicia social conforman su médula literaria, una rica en voces experimentales que sorprenden y atrapan los sentidos.

102. Dany Laferrière

Concederle el premio daría pie a una interesante polémica debido al contenido «escandaloso» de sus novelas. Aunque no es oficialmente autobiográfica, toda su producción puede asimilarse como auto-ficción o autorreferencial.

103. Marilyn Chin

Su exquisita poesía y prosa encapsulan un proceso de asimilación cultural a través de un imaginario poderoso, rico y siempre lúdico en el que Oriente se encuentra con Occidente y revela las ventajas y desventajas de una doble identidad.

104. Jim Crace

La descolonización del Nuevo Mundo, la descomposición poética de dos cuerpos, la reinterpretación de un viaje mítico escrupulosamente custodiado por fanáticos, ficciones breves que forman parte del tratado culinario más curioso.

105. Edna O’Brien

Desde el inicio de su carrera literaria ha elegido temas delicados demasiado humanos para pasar inadvertidos. Su voz vibra con honestidad y ha cosechado algunos escándalos porque incomoda a quienes deberían sentirse así.

106. Ben Marcus

A veces no se trata de reconocer una trayectoria, sino de premiar la dirección que una obra está tomando. Sus textos existen en un plano original, inexplorado y perturbador, como el relato del niño que no ama a sus padres.

107. Sylvia Iparraguirre

Su voz y estilo únicos casi se han convertido en marcas registradas en la literatura argentina. Los personajes de su ficción poseen visiones del mundo tan sesgadas que casi siempre parecen flotar en realidades alternativas.

108. Mark Doty

Su talento como autor de memorias y poeta parece estar privilegiado con el tipo de «fuerza histérica» capaz de partir rocas, derribar muros y cortar la carne para acceder a la belleza interior que permanece oculta para la mayoría.

109. Lydia Davis

Creadora de un estilo único en la literatura estadounidense contemporánea. Empaca tanto y de forma tan inteligente en relatos breves que ha ganado la admiración de cientos de escritores a nivel mundial. La perfección lingüística es su meta.

110. Jean-Philippe Toussaint

Pertenece a una nueva generación de Nouveaux Romanciers. Su primera novela, que lo catapultó a la fama literaria, fue publicada por la legendaria Les Éditions de Minuit y trata sobre un hombre que vive en su propio baño.

111. Ernesto Lumbreras

Su lenguaje es casi adánico: parece describir Las Cosas del Mundo por primera vez, como si nadie más lo hubiera hecho antes, como si leerlo se tratara de aprender un idioma que «suena» transparente de tan nuevo.

112. Jeanette Winterson

Desdibuja fronteras literarias, ha utilizado narradores sin identidad de género, favorece la polinización cruzada en sus libros y fusiona realidad y fantasía para tejer algunas de las historias más singulares de la literatura contemporánea.

113. Luis Goytisolo

Ha escrito uno de los logros más importantes de la literatura española. La densidad de su mente fluye sin obstáculos en una corriente de introspección y despertar intelectual que le ha valido comparaciones con muchos clásicos.

114. Marjorie Welish

Quizás la figura más radical, intransigente e innovadora de la poesía estadounidenses desde Gertrude Stein. Experta en la desintegración y reconstrucción de un lenguaje hecho de «partes usadas» y experimentación gramatical.

115. Raúl Zurita

A su poesía no le interesa encontrar respuestas, sino formular preguntas que aún no han sido pronunciadas. Su voz avanza encima de ciudades y al ras del campo, describiendo la vida, la geografía y las injusticias de una nación.

116. Gordon Lish

Además de brindarle consejos de redacción a algunos de tus autores estadounidenses favoritos, ha escrito varias novelas excéntricas y difíciles de clasificar, así como muchos cuentos exquisitamente elaborados.

117. Larissa Volokhonsky y Richard Pevear

Traducir la obra de un autor es un acto innegable de escritura creativa. Ellos revitalizaron los clásicos rusos en un idioma hablado por 1,500 millones de personas en todo el mundo, de las cuales 400 millones son hablantes nativos.

118. Mary Jo Bang

La mortalidad parece ser el motor principal de sus poemas magníficos que capturan con agudeza el inexorable paso del tiempo o la muerte de un ser querido. Además, ha creado una versión contemporánea y accesible de la Comedia de Dante.

119. Robert Hass

Uno de los poetas estadounidenses más talentosos del último siglo. El escrutinio de su mirada parece tener el poder de una máquina de rayos X de la que nada escapa: la súbita presencia de un pájaro, el desconsuelo en un gesto.

120. Mary Caponegro

Durante muchos años ha creado desde los márgenes del mundo, permaneciendo siempre callada y alejada de los reflectores (como si estuviera atrapada entre paréntesis), una de las obras más increíbles, desconcertantes y surrealistas.

121. Fanny Howe

Infancia y memoria informan gran parte de su poesía. La metafísica hace lo mismo con su ficción fragmentada, que puede ser en extremo lírica. Una indiscutible anti-maniquea que no cree en la tediosa separación entre ficción y poesía.

122. Lance Olsen

Quienes simplemente lo etiquetan como «demasiado extraño» o «demasiado experimental» y eligen no leerlo nunca sabrán que está escribiendo algunos de los mejores y más creativos libros de la literatura estadounidense, del tipo que te deja asombrado.

123. Charles Simic

Durante más de medio siglo ha influido en el pulso poético, no sólo de las letras estadounidenses, sino también en el de otras latitudes. Categorizar su trabajo es imposible porque fue privilegiado con una visión panóptica.

124. Miljenko Jergović

Uno de los candidatos más recientes en mi lista. Autor de una novela-telaraña autobiográfica de proporciones épicas y de relatos que se centran en los vestigios de humanidad entre aquellos rodeados por las atrocidades de la guerra.

125. Mia Couto

Es incapaz de escribir un libro insípido: un hombre lamenta la muerte de su esposa mientras espera una disculpa de Dios, una manada de leonas ataca a las mujeres de un pueblo. Raíces mágicas fusionadas con dilemas modernos.

126. Anne Carson

Una vez que muerdes su anzuelo, no te deja escapar. Los libros de esta canadiense te permiten descubrir formas poéticas que no creías posibles. Comienzas siendo una persona y te conviertes en una distinta tras leerla.

127. Thomas Pynchon

El Big Daddy del maximalismo. El que te fríe el cerebro con sus novelas enmarañadas y cómicas. Leer una debería ser recompensado con una medalla porque la mayoría perece en el camino, sin llegar a la orilla opuesta.

128. Dag Solstad

El noruego más admirado por sus colegas. Conocido por situaciones incómodas y personajes desarraigados que no pueden encontrar un lugar en el mundo. A ratos experimental (escribió una novela compuesta únicamente por pies de página).

129. Joy Williams

No se quita los lentes oscuros. Conduce una Ford Bronco. No tiene computadora ni correo electrónico. Su celular es arcaico. Es, posiblemente, la mejor cuentista con vida que retrata como nadie más la «experiencia americana».

130. Luce Irigaray

La figura más importante y fascinante de la filosofía contemporánea. Ha escrito ensayos apasionados, así como diálogos imaginarios y líricos, con el fin de comprender las disparidades jerárquicas entre lo masculino y lo femenino.