contacto@katabasisrevista.com

Foto: Alejandra Villela

Naomi Shihab Nye nació en St. Louis, Missouri. Su padre era un refugiado palestino y su madre una estadounidense de ascendencia alemana y suiza, Nye pasó su adolescencia tanto en Jerusalén como en San Antonio, Texas. Obtuvo su licenciatura de la Universidad Trinity en San Antonio. Nye ha recibido numerosos honores y premios por su trabajo, incluido el Premio Lavan, el Premio de Poesía Paterson, el Premio Carity Randall, el Premio de Poesía Isabella Gardner, entre otros. En 2018, recibió el Premio Lon Tinkle al logro de toda una vida del Texas Institute of Letters. 

La experiencia de Nye tanto de la diferencia cultural como de las diferentes culturas ha influido en gran parte de su trabajo. Conocida por la poesía que brinda una nueva perspectiva a los eventos, personas y objetos comunes, Nye ha dicho que, para ella, “la fuente principal de la poesía siempre ha sido la vida local, los personajes al azar que se reúnen en las calles, nuestra propia ascendencia se definió a través de pequeñas tareas diarias esenciales”. Nye es considerada una de las principales poetas del sudoeste estadounidense. Una colaboradora de Contemporary Poets escribió que “llama la atención sobre la mujer como una criatura irónica y humorística con inteligencia enérgica y fuerte y un sentido de libertad personal inaudito”.

Presentamos al público de habla hispana su poema “Two Countries” en la traducción de

Lucía Sepúlveda

Skin remembers how long the years grow
when skin is not touched, a gray tunnel
of singleness, feather lost from the tail
of a bird, swirling onto a step,
swept away by someone who never saw
it was a feather. Skin ate, walked,
slept by itself, knew how to raise a 
see-you-later hand. But skin felt
it was never seen, never known as
a land on the map, nose like a city,
hip like a city, gleaming dome of the mosque
and the hundred corridors of cinnamon and rope.

Skin had hope, that’s what skin does.
Heals over the scarred place, makes a road.
Love means you breathe in two countries.
And skin remembers–silk, spiny grass,
deep in the pocket that is skin’s secret own.
Even now, when skin is not alone,
it remembers being alone and thanks something larger
that there are travelers, that people go places
larger than themselves.

La piel recuerda cómo los años se alargan
cuando no es tocada, un túnel único y gris, pluma perdida de la cola 
de un pájaro, revoloteando en un escalón,
barrida por una persona que no vio que era una pluma. La piel comió, caminó,
durmió sola, aprendió a despedirse con una mano en adiós. Pero la piel sintió que nunca 
fue vista, nunca reconocida 
como la tierra en el mapa, movida como una ciudad, 
bailada como una ciudad, domo dorado de mezquita,
y cien corredores de canela y amarras.

La piel era esperanza, ese es su papel.
Cicatriza una y otra vez sobre la misma herida, inventa una calle.
El amor significa que respiras en dos pueblos.
Y la piel recuerda – seda, hierba seca, su propio secreto que está en el fondo de su bolsillo.
Incluso ahora que no está sola,
recuerda cuando lo estaba y agradece a lo infinito
que hay viajeros, que hay gente que viaja por lugares
mayores que sí mismos.

Lucía Sepúlveda

Total Page Visits: 1387 - Today Page Visits: 2
Share This