Tomás Emilio Sánchez Valdés
Jazmín, la verdad que no tengo mucho tiempo para escribirte. Como ya sabrás por las noticias, no avanzamos de Rio Negro, estamos estancados en esta frontera con la nada misma. Pensé escribirte un poema, improvisé versos mientras formábamos filas y casi me como una estaqueada por andar embobado en tu recuerdo. La peor parte es que acabé olvidando todo y te pido disculpas por eso. Todav
Me encantaría volver a dejarte poemas tirados debajo de tu banco o terrados en tu mochila con una cinta roja. Mas en el fondo sé que lo más probable es que pronto sea yo quien tome un destino similar a ellos.
Confío en que se ganará la guerra, pero estoy totalmente seguro de que sólo mis altos superiores la podrán festejar. La
La guita de los ahorros está en la segunda fila de la baldosa cuarta baldoza del baño. Y si querés ir llorando por mí, para recuperarte lo antes posible, ya tenés mi permiso.
Te amo
Ojalá tuyo, Manuel