Ilustrado por: Elienai Lucero
Alejandro Chang
Avanza corriendo desesperadamente por aquel pasillo que parece nunca acabar. Luces intermitentes proyectan sombras tenebrosas, cegando sus ojos. Laura no logra entender cómo llegó a ese lugar. Todo parece indicar que se encuentra en un hospital, así lo indican los letreros sobre las puertas: Psiquiatría, Psicología, Desórdenes de Personalidad…
Sin dejar de correr, vuelve a mirar hacia atrás. Ahí están todavía, persiguiéndola con saña, emitiendo gruñidos espantosos. Es un grupo de unas veinte personas, todos vestidos con ropas de hospital, unos con batas, otros con camisa y pantalón. Una característica es común a todos: la mirada perdida y los movimientos totalmente faltos de coordinación.
En un instante de lucidez, una idea fugaz y aterradora cruza por su mente. Sin poder contenerse exclama:
-¡Dios Mío! ¡Estoy en un hospital psiquiátrico! ¿Qué está pasando? ¿Qué hago aquí?
Procura encontrar un lugar donde protegerse y esconderse; sin embargo, una tras otra, las puertas que encuentra ante sí están cerradas con llave. Desalentada, nota como las fuerzas comienzan a flaquearle. Los pies se vuelven muy pesados, respira con dificultad y el corazón late apresuradamente, martillándole el cerebro. Continúan acercándose los alaridos y el ruido de los pasos. La sangre parece helársele en las venas producto del miedo.
A punto de desfallecer, cree ver un resquicio de claridad que se filtra por debajo de una puerta al final del pasillo. En un último esfuerzo, se lanza hacia aquella vía de salvación. Casi arrastrándose, consigue llegar a la tan ansiada puerta. Entonces ocurre lo inesperado… ¡La puerta no se abre!
Sus perseguidores ya casi la alcanzan, escucha sus jadeos entrecortados y los aullidos guturales, celebrando la próxima captura de su presa. Agotada, Laura tira del picaporte con las pocas fuerzas que le restan. De pronto, siente como una mano se agarra a la manga de su abrigo. Aterrorizada, lanza un último y visceral grito, sabiéndose completamente perdida…
¡Laura! ¡Laura! ¡Despierta!
Abre los ojos, sobresaltada ante la voz y las sacudidas de que es objeto, y ve a su madre sentada en el borde de la cama.
Alejandro Chang
Autor
Nací el 13 de febrero de 1990 en la ciudad de Ciego de Ávila, Cuba. Soy ingeniero industrial. Desde pequeño me incliné por la literatura, mis géneros preferidos son la poesía y el cuento. Hace poco publiqué mi primer libro de poesía, titulado Palabras de un poeta aficionado.
Elienai Lucero Hernández
Directora de Multimedia
Me llamo Elienai Lucero Hernández, me llaman Elienai, Lluvia, Kumy, Niennai, Nai, Nani, a veces soy Lúth L. L. H. En casi todas mis versiones soy aficionada de la literatura, la loca de los cuadernos, dibujos y misionera de la revista Katabasis ¿Ya leíste todos los números? ...deberías.
