Ilustración: Yessenia Rodríguez
Emmanuel De los Robles
Vivo preso en la jaula
de sombras del ciruelo,
el sol es quien me viene a visitar;
y mi espalda comulga con el musgo,
que hablan de tantas cosas
de los secretos de nostalgias viejas
del aullar de los perros por las noches,
tal vez de los camiones o las rosas
al final, yo qué sé.
He tirado mi libro en la hojarasca
para que le hable al suelo del amor,
yo, en cambio, vivo preso
de rejas de madera de los árboles.
Escucho los debates
del dorso de mis manos con la tierra
de zanates infieles,
de los coros y el canto de las nubes
de las horas perdidas en las hojas,
pero en fin, yo qué sé.
Si a este pago gané el cautiverio
que mañana se extinga todo libre,
que fuercen todas las almas
a escuchar la sonata de las hojas.
Sólo hablo, yo qué sé.
