Nadia Arce
Es tan bueno ver bajo los huesos los mismos huesos
sobre la carne, la misma carne
y las facciones y el contorno idéntico de los ojos
es tan bueno respirar y entender
que no hay soledades en el aire
tan bueno saberse de lo mismo,
mirando a otro lado.
Hay necesidades necesarias,
entran severas a instalase
y es tan bueno verlas para tenerles miedo,
guardarles distancia,
apagarles la voz.
Es tan bueno convertirse en cuenta horas,
en otra persona
donde la mente juega el papel secundario,
es un simple fondo
es tan bueno entretenerse con lo propio
tan bueno conocer al enemigo que viste igual que tú
y lleva tu nombre.
Es bueno verlo.